Llegada a Ikea y todo son sorpresas
Una vez en el pàrquing se ve como cualquier centro comercial, pero todo cambia al entrar por la puerta.
En el pasillo al que dan las cajas hay una tienda bar para comprar y comer cosas típicas de Suecia, con lo que me gusta la cultura gastronómica... ¡Vamos, que me encanta comer!. Justo en frente de la puerta, la escalera que sube a la sala de exposición con un estante en el que vemos cintas métricas, lapiceros y papel para marcar y tomar notas, incluyendo el catálogo (o biblia de los muebles suecos, por el tamaño), eso me suena de la vez anterior y es un buen entretenimiento para los niños, ir por la tienda midiendo.
A un lateral veo unas taquillas con contraseña, esto ya me sorprende mas, he estado alguna vez en Ikea antes pero nunca me había fijado en que tenían taquillas... Yo llevo el catálogo desde casa en el bolso y un libro tocho que suelo tener ahí dentro, palabra que cada uno o dos meses cambio de titulo 🙋, y la verdad es que lo de las taquillas le empieza a gustar mucho a mi hombro. Voy directa, no hay que poner moneda ni nada. Y ahí que se queda el bolso, total no creo que me dejen tumbarme a leer en las camas.
Traigo una lista en un bolsillo con los muebles que quiero ver y otra en el otro con lo que la voy a pedir que busque en cuánto empiece a aburrirse la pequeñaja.
Yo que me dedico a eso de entretener niños tengo un radar especial para ciertas cosas y justo antes de empezar a subir por las escaleras mecánicas me da por mirar y lo veo, me giro en redondo y
¡¡ Hay Miniclub, Emma!!
Menuda Sorpresa, mi última vez en un Ikea fue hace casi 15 años y claro, por ese entonces o no había o no me fijé porque no tenía hija...
Los niños pueden quedarse en el miniclub de Ikea una hora y es gratis. Tienen varios monitores y monitoras, un área de mini cine (una tele grande con gradas de madera para que todos los que quieran puedan verla cómodamente), mesas y sillas, varios juguetes muy cuquis, peluches, trenes de madera, elementos de construcción y material artístico, zona de juego simbólico, libros para estas edades, piscina de bolas y juguetes de lógica. El lugar está decorado con colores vivos y muchos cojines donde apetece sentarse.
Llegamos
a la entrada del miniclub, hay que registrarse.
La miden en un medidor de pared, es muy poca cosa y se nota a la legua que no pasa de la altura marcada, pero es que así los niños son conscientes de cuál es la altura mínima (95cm) y máxima (124cm) deben tener al menos 3 años y no pueden entrar mayores de 6-7 años, como si desde esa edad no dieran tanta guerra. Los pobres, no tienen un lugar para ellos en el miniclub. Pero es que nos dicen que lo tienen en la planta de arriba.
Ahora hay que esperar turno de entrar porque hay cola de espera... en unos 20 minutos hay hueco. Perfecto para tomar un buen café en ese bar de la entrada y subir a la sala de exposición con energia.
Nos da la hora y la dejamos en el miniclub, la monitora nos dice que para recogerla hay que llevar el dni del padre/madre que está escrito en el registro del nene. No esperaba menos.
Lo difícil fue mirar todo lo que había que mirar... y volver a tiempo para recoger a Emma 😂, ese es otro cantar. Sí, hay un "plano" para saber dónde estás y cuánto te falta por ver de la exposición pero no es un plano del espacio físico real, si no de los departamentos o apartados en los que se divide la nave (digamos del olvido, porque es lo que te ocurre una vez que entras, te olvidas de todo y eres incapaz de recordar el objetivo principal.)
La odisea
El plano es un cartel azul con un recorrido lineal en blanco donde marcan con numeración los diferentes espacios...32!!!! si, habéis leído bien, 32 espacios que visitar. No es que sea interminable pero da esa impresión.
Nada mas entrar en la sala de la exposición sufrimos un mareo repentino, una desorientación total y la impresión de no volver a salir de ahí en lo que nos queda de vida "deberíamos habernos despedido mejor de Emma".
Enseguida ves el letrero azul y respiras un tanto aliviado...hay salida, aunque parece estar lejos. Empiezas, como en un museo, a pasear de derecha a izquierda con seriedad, intentando no dejarte llevar y hacer la visita con la parte racional de la mente "comprar solo lo que necesitemos" "analiza lo todo para ver si es lo que necesitas" esas consignas cruzan tu cabeza un ratito, pero entonces llegas a los miles de espacios creados para ti, tan confortables, tan hogareños. Te olvidas, no de tu lado racional, si no de toda tu cabeza, parece como si solo existieran los 2 ojos y no dieran a basto, quieres tocarlo todo, probarlo todo...¡¡¡Llevártelo todo!!! 😭 con lo bien planeado que lo tenía...
"Cariño, quedan 30 minutos para recoger a la niña" "sin agobiar papa, que AUN queda media hora"
Debería haberle hecho caso desde el principio y no entrar en la exposición mareante, sino ir directo al almacén y ver los muebles ahí. Os cuento como lo preparé para que entendáis porqué digo esto.
Descubrí que podía hacer la lista de la compra online, desde su web, e imprimirla con la ubicación de cada objeto. Lo malo es que yo creía que esa ubicación era la de la exposición. Pues nooo, solo la del almacén. y si, en el almacén están la mayoría de los muebles montados cerca de sus cajas (cosa que ignoraba)
Bueno, hice una lista con varios elementos útiles para cada una de las funciones y espacios que quería crear en casa, para el rincón de lectura de Emma añadí varios modelos de estanterías que tenían las medidas y colores adecuados, para el baño escogí varios modelos de muebles altos etc.
Solo tenía que ir a verlos en persona para asegurarme de qué modelo quería y eliminar el resto de la lista, pedir en el mostrador el transporte necesario y pagar lo que fuera por los portes para traerlos todos en un solo viaje.
Lo malo es que entré en la exposición pensando que vendría la ubicación que yo llevaba en la lista y que sería rápido... y no veáis lo que nos costó llegar de nuevo al parque infantil.
La tienda de Ikea esta organizada para entrar por la exposición (1ª planta) y salir por el almacén (planta baja). Para subir a la expo puedes usar escaleras mecánicas o ascensor de "solo subida". Si subes por las escaleras no te enteras de que el ascensor no baja hasta que lo intentas al ver que no hay otro modo de bajar hasta el final de la 1ª planta.
El tema era llegar a Emma antes de que pasara la hora, habiendo hecho todo o no. Cuando nos quedaba poco tiempo unos 15-10 minutos empezamos a buscar como acceder al parque pero el ascensor cercano a la escalera de subida, que está al lado de la puerta y de las taquillas, donde había dejado el bolso con mi DNI dentro, era solo para subir, el cartel reza "prohibido bajar, solo subida" así que seguimos a todo correr para cruzar todos los espacios que nos faltaban por cruzar, y no vimos nada, solo otras escaleras con ascensor de bajada pero a menaje...un empleado de iluminación
nos dijo que bajando por ahí podíamos recoger a Emma, pero no. Claro, el no sabía que yo no llevaba encima mi DNI, ese acceso al parque era la parte de atrás, puedes recoger a los niños por ahí si tienes el DNI a mano (aaaarrrggghh!!!) La monitora dijo que debía volver por donde había venido, no se la ocurrió decirme que si cruzaba todo el almacén llegaría al mismo pasillo de la puerta principal y nosotros no lo sabíamos. En fin, fuimos hacia atrás y encontramos el ascensor de "subida" lo que ella recomendaba era usarlo para bajar, aunque tenías que esperar a que alguien subiera para apretar el botón desde dentro, puesto que el botón de fuera no estaba conectado. Bueno, conseguimos el DNI y a Emma, (que
estaba encantada por lo bien que se lo había pasado, de hecho quiere volver). Volvimos a la expo a mirar lo que nos faltaba, los muebles del cuarto de la niña, y claro está ella jugó en las zonas de "juego" y nos llevamos un conejo gris monísimo, bajamos por el almacén, pagamos el conejo y nos fuimos sin encargar el transporte de los muebles que queremos... pero si nos hicimos del club
Ikea family, una tarjeta naranja con la que obtener descuentos y otras cosas.
Pero que te quede clara una cosa, Ikea es un negocio en el que los niños son siempre bienvenidos.
Ofrecen tantas cosas para niños que parece que Ikea es un centro de ocio infantil donde además venden muebles. No solo tienen dos salas en las que pueden jugar ellos, es que también hay zonas de juego a lo largo de la sala de exposición (o eso dice en su web) aunque la verdad son los propios muebles infantiles expuestos y los juguetes a la venta con los que pueden jugar un rato...la mía lo hizo, jugó con un conejito gris de peluche precioso y ahora es uno mas de la familia...esta es la verdadera razón para dejarles jugar con las cosas de la tienda, va a ser que "hacerse el sueco" no es tan mala idea después de todo.
La primera misión Ikea fue un ¿fracaso? la verdad es que el objetivo principal no llegamos a cumplirlo, pero nos fuimos con la sensación de haber pasado una tarde maravillosa y queríamos volver pronto. Entre otras cosas porque aun necesitábamos los muebles.
Tanto prepararlo para acabar haciendo lo mismo que siempre, ¡¡el idiota!! La verdad es que estoy convencida de que en el aire acondicionado de la 1ª planta ponen algo, y que el mareíllo y la desorientación total son los primeros síntomas de la congelación del cerebro.
Tranquila Emma que volverás al parque infantil de la tele delante de las escaleras gigantes, y esta vez lo haremos TODO bien.
El retorno
Vale, una semana después "me puse farruca" como si tuviera 3 años y, claro está, Emma se unió a mi. Las dos queríamos volver al Ikea y no hubo nadie que se atreviera a decir lo contrario... Pero esta vez iremos a comer ahí que papá se quedó con ganas de probar esas albóndigas suecas. Se que os va a parecer un anuncio pero es que en Ikea tienen algo para cada uno de nosotros...
Comer en Ikea
El restaurante de la primera planta, donde la exposición, es tipo buffet, coges platos, cubiertos etc y haces la fila avanzando pegado al mostrador de la comida. Los empleados te preguntan que quieres y van poniendo la ración aprendida en el plato que les das. Entonces vas a tu mesa, como cualquier otro buffet. Papá y yo llevábamos una bandeja con la comida para tres repartida y Emma otra con las bebidas en botella. Mientras buscábamos una mesa libre, un empleado llegó a nosotros con un carrito, Se agachó a la altura de Emma y habló con ella, Emma colocó la bandeja en el carrito y lo empujó por las patas para acercárnoslo. El empleado nos informó de dos cosas:
- de que la tarjeta family no valía en ese restaurante, así que no podíamos tomar el café gratuito ahí, y nos dijo donde hacerlo, en la cafetería del final del recorrido (de las 32 etapas del mapa lineal)
- de que podíamos comer en el "ático" y por donde subir.
Hay tres restaurantes o sitios para comer en el ikea son bastante económicos, tienen menú infantil que consiste en lo mismo que tienen para adultos pero con menos cantidad y mas barato que un plato adulto. Por lo que pueden escoger entre carne, pescado, verduras y ensaladas, pastas y comida vegana además de la bebida de su agrado y postre a elegir. Aun me pregunto porque no hacen esto en todos los restaurantes de España, en los que el menú infantil cuenta con un único plato y suele ser mas bien fast food.
El bar tienda de la entrada donde puedes tomar café y picar algo, el restaurante con "Ático" a la mitad de la exposición y la cafetería del final del recorrido, que también tiene un área de juego para niños, donde tu estás sentado delante tomándote algo. ¿Es o no es un parque infantil enorme?
El "Ático"
Es un espacio que está arriba de todo, tiene algunas mesas y sillas grandes para sentarse a comer pero lo mejor es que cuenta con una canasta, pelotas varias, algun cojín y varios libros un estante con un par de puzles... en fin varios juguetes para niños mas mayores.
Exacto, es el sitio del que nos hablaron el primer día para que jueguen los mayores de 6-7 años. También es el lugar donde se realizan los talleres infantiles y otras actividades que ofrecen para niños.
No está mal la sala, pero no puedes dejar a los niños solos, no hay supervisión. Es mas para que, cuando ellos estén hartos de compras, puedas acudir ahí y darles un rato de esparcimiento o llevarlos a uno de los eventos para niños que organizan.
Missión cumplida y servicios de Ikea
Acabamos de comer, bajamos a Emma al miniclub y continuamos la visita. En esta ocasión vimos todo mas rápido y solo nos entretuvimos en aquellas cosas que nos interesaban. Como ya lo sabíamos, en esta ocasión pusimos el DNI de papá en el registro de Emma y pudimos recogerla a mitad de camino. Justo antes de ir a ver los muebles de su habitación. Se divirtió un rato probando camas, sillas molonas, balancines y columpios y después pasamos a la zona de juguetes y material artístico... Ni yo quería continuar.
Me hubiera quedado ahí jugando con todo. Papá es muy blando y la dejó escoger otra vez algun peluche, y ella, que no es tonta, escogió dos. El príncipe no es nada sin su princesa y la princesa necesita un príncipe para no aburrirse. Se pasaba de su paga semanal pero sabíamos que
podía esperar dos semanas sin detallito.
Bajamos al almacén y cogimos los muebles que necesitábamos con la guia de mi lista de la compra, Puedes imprimir la lista desde la web clicando en carrito, además, entonces podías activar la opción de incluir la ubicación exacta en tienda. De esta manera pudimos ir a por ellos nosotros mismos antes de pasar por caja donde nos dijeron que podíamos pedir entrega en domicilio... Miramos los precios y la verdad es que no sale muy rentable.
Actualización de la información.
Hoy (2023), después de una pandemia, han cambiado varias cosas en relación al último párrafo. Dejad que os ponga al día.
Ahora no te dirán donde están exactamente los artículos que buscas, tienen el servicio de Click and collect. Consiste en que tu los encargas desde la web, por tlf o la app y ellos te lo preparan para cuando llegues a la tienda. Así no tienes que perder tiempo buscándolos. Pero tampoco puedes verlos en persona. Para eso tienes que ir un día, tipo excursión con la familia que como veis merece la pena, y dejarlos encargados.
Otra opción es entrega a domicilio o en las taquillas Ikea en diferentes puntos de España. Si queréis ver las condiciones tenéis el enlace algo mas arriba. Los precios no son los que eran antes porque ahora, entre otras cosas, hacen entrega de pequeño paquete y paquete mediano con costes adaptados.
Y una de las mejores novedades de Ikea es que hoy cumplen mejor que nunca su objetivo de proteger el planeta. Ofrecen mercado circular de sus propios productos, te los compran si los vendes, los reparan si es necesario y los ponen en reventa como mueble de segunda mano en sus propias tiendas. Como es algo que me gusta mucho, yo soy muy de reciclar y de dar una segunda vida os dejo el enlace para que veas qué puedes hacer en el mercado circular de Ikea
Me gusta Ikea y no puedo negarlo. Desde que llegó cuando yo tenía ¿17 años? ha llovido mucho y hoy expanden con tiendas mas pequeñas y taquillas para acercarse mas a nosotros. Facilitan la compra para que el dia de visita a Ikea sea, como dije arriba, una excursión entretenida para la familia.
Así que, si no tienes mejor plan para un dia de lluvia y estás hasta el moño de oir a los niños gritar como locos dentro de casa, meteros en el coche y directos a Ikea. Es uno de los pocos negocios donde las familias son realmente bienvenidas.
Comentarios
Publicar un comentario
hola, gracias por tu comentario, te responderé lo antes posible